miércoles, 9 de diciembre de 2009

La tetería del oso malayo; de David Rubín (2006)

David Rubín, dibujante y guionista gallego, se mueve entre la animación (ha sido codirector de la cinta "El espíritu del bosque" en 2008), y los comics. Ha publicado dos obras importantes en crítica dentro del panorama español: El circo del desaliento (2005) y La tetería del oso malayo (2006).

La Tetería fué publicada por "episodios" en diversas revistas como Dos Veces Breve. La Tetería reúne varias historias cortas (10 o 12 páginas) que suceden siempre en la tetería del oso Sigfrido. Por allí deambulan los más diversos personajes con problemas emocionales. Unos en busca de amor, otros en busca de cura a su dolor, otros con necesidad de compartir hechos pasados, superhéroes venidos a menos... La sensación general tras haberlo leído es la de "He leído algo agradable y cuidado" pero nada más, nada que vaya a perdurar mucho en mi memora. Las historias no me han emocionado ni me han tocado por dentro, de hecho me han parecido historias "tipo" convencionales; es decir que son historias que ya me habían contado muchas veces y en muchos lugares pero con otros personajes. Historias tipo "Disney". Algo edulcoradas aunque pretendan no serlo y sonar a tristeza: a melancolía excesiva. Sólo destacaría la fuerza de "Antón en llamas". Que sean historias cortas le da puntos, sí, pero la última historia (de unas setenta páginas) es un bajón considerable: de una lentitud pasmosa, con el autor alargando la historia de modo innecesario y repitiendo viñetas varias veces.

El dibujo tampoco me ha convencido demasiado. De hecho, para ésta recopilación, Rubín ha redibujado casi todas las historias, para que mantengan un nivel más o menos homogéneo durante todo el volumen. No estoy muy de acuerdo con esa decisión. Creo que hubiese sido mucho mejor dejar los dibujos tal y como estaban, y así ir observando la evolución del autor a través de las historias. Pero bueno, sólo es un punto de vista, una manera de verlo como conjunto.

De alguna manera, después de muchos años leyendo comics, uno se va haciendo menos permeable, uno va exigiendo más a lo que va viniendo. Supongo que es normal porque así comparas las cosas nuevas con lo ya leído. Éste ha resultado un poco decepcionante.


No hay comentarios: